ANIMACIÓN LECTORA – PAPÁ, ¡TENGO MIEDO!
FICHA BIBLIOGRÁFICA
Título: Papá,
¡tengo miedo! Autor:
Carlos Álvarez de Eulate
Editorial: Bruño Ilustraciones: Marta
Fábrega
Edad
recomendada: 6 años Primera
fecha de publicación: enero 2014
¿POR QUÉ ESTE
LIBRO?
Los padres, maestros y
bibliotecarios deben ofrecer a los niños libros que estimulen su imaginación y
su creatividad, que despierten y desarrollen su sensibilidad y ayuden a
entender los sentimientos, que provoquen la reflexión y el sentido crítico, que
les ayuden a conocerse a sí mismos y al mundo que les rodea, que les despierten
aficiones e intereses hacia nuevas parcelas de la vida cultural, social,
artística, etc., que estimulen la confianza en sí mismos y en el futuro.
Al hablar de Carlos Álvarez de Eulate, aquellos que han tenido la suerte en
leer algunas de sus lecturas infantiles, esbozarán sin duda una sonrisa que
refleja el bonito sentimiento que provocan libros. Carlos posee un inusitado talento a la hora
de inventar historias llenas de magia que cautivan de forma inmediata tanto a niños
como a adultos. Como he podido analizar este libro en una actividad previa que
he realizado, he pensado que sería bueno mantenerme fiel a este autor y a esta ilustradora,
que han conseguido hacer que mis horizontes se amplíen al analizar mi primer
libro en lengua extranjera.
He encontrado
una cita de Piaget muy adecuada en lo referente al tema principal del cuento,
el miedo infantil, ya que el libro trata uno de sus puntos clave: que el niño
tenga un contacto directo con la realidad que le rodea a través de experiencias
que desarrollen en él un interés por los miedos infantiles. Piaget (1969) dice
que ‘las estructuras mentales se
construyen por interacción entre las actividades del sujeto y las reacciones
del sujeto’, por lo que debemos crear experiencias significativas entre el
niño y los miedos en cuestión.
La edad
recomendada para leer este libro, es desde los 6 hasta los 8 años (1 y 2 de
EPO), edades muy apropiadas para este tema, debido al trasfondo educativo que
tiene esta historia.
PROPUESTA DE
ACTIVIDADES PARA ANTES DE LA LECTURA
Actividades con las portadas:
Se le entrega
al alumnado una copia de la portada del libro que vamos a leer, pero le falta
el título. Los alumnos, trabajando en grupos, deberán proponer un título.
Se observa la portada entre
todos y se estimula diálogo con preguntas como: ¿Qué es lo que veis? ¿Qué son
esas líneas circulares que aparecen sobre la cabeza de la chica? ¿Qué tiene la niña en sus manos? Mira la expresión de la cara de la chica. ¿Qué crees que está sintiendo?
Se le desvela al
alumnado el título del libro que vamos a leer; los alumnos deberán dibujar una
ilustración que se adecúe al título, al tiempo que tratan de averiguar de qué trata
el libro.
Se le muestra un
puzle desordenado que los alumnos deberán resolver; al hacerlo se descubre que
corresponde a la portada de un libro: ¿De
qué tratará? ¿Qué aventura nos
contará?
Se reparten
imágenes de los personajes del libro. Después de colorear los personajes, el
alumnado deberá hacer una descripción verbal de los mismos, e incluso narrar
una pequeña aventura que les pueda ocurrir. La imagen se podrá recortar y pegar
en un folio para, a continuación, ponerles unas bonitas pastas de cartulina con
el título ‘Nuestros personajes’. De
esta forma, tendremos un libro para el aula o para regalar a los más pequeños. Además,
más adelante en el trimestre, veremos si ese personaje es realmente así en el
libro y si le han ocurrido cosas parecidas a las que los alumnos esperaban.
Se reparten
las ilustraciones del libro desordenadas, de forma que los alumnos deban ordenarlas
en un orden de su elección. Después, siguiendo ese orden, los alumnos escribirán,
en grupos, el texto que corresponde a dichas ilustraciones. Pero, ¿qué orden
tendrán realmente las ilustraciones? ¿Qué ocurrirá en el libro?
Hablar del autor,
Carlos Álvarez de Eulate. Aunque quizás sean demasiados pequeños para conocer
su nombre, se les puede preguntar si saben algo sobre él o si han leído algún
libro suyo. Se puede llamar la atención acerca de la firma de la ilustradora,
que está situada al lado derecho de la alfombra de la portada, y preguntarles
qué creen que es, para a continuación desvelar que es la firma de Marta Fábrega,
la ilustradora. ¿Sabrán los alumnos qué hacen los ilustradores?
¿Qué pasará
ahora? El/la profesor/a lee el primer capítulo o un párrafo del libro que
queremos que los alumnos escuchen. Es importante que el capítulo sea interesante
y divertido, de forma que incite a la lectura. Al leer el párrafo, debemos
parar en un momento que despierte el interés por saber qué ocurrirá a
continuación. Por ejemplo, un párrafo perfecto sería el de la página 20, que comienza
con ‘A veces, solo a veces’ y termina
en la página 22, con ‘Papá, ¡tengo mucho
miedo!’.
Preguntar una
vez más si alguien es capaz de adivinar el título para, a continuación, desvelarlo.
DURANTE LA LECTURA
Aunque el
libro no está dividido en capítulos, se observan pequeños descansos entre una
parte y otra gracias a la serie de miedos que tiene la protagonista. Cada fase
es bastante corta, así que cada sesión con la clase puede incluir fácilmente dos
miedos o más. Una clase de duración de unos digamos 50 minutos puede quedar dividida
así:
·
10
minutos - Resumen de las últimas páginas
que se habían leído.
·
30
minutos – Lectura de 6 ó 7 páginas (hay un total de aproximadamente 42 páginas
dedicadas a la lectura, incluyendo las ilustraciones).
·
10
minutos – Resumen de las páginas leídas, dedicando tiempo para preguntas y dudas.
Los alumnos pueden también hablar acerca de lo que creen que va a pasar en la
continuación en la historia.
Primera sesión
La primera página
del cuento comienza dando información sobre el autor, escrita en primera
persona. Carlos habla de su interés y su pasión por lo que hace; esto es muy importante
para los niños que tienen una edad en la que se impresionan con facilidad.
El autor ha personalizado
el libro con un mensaje para que todos los niños puedan relacionarse con
Carmeta.
Me parece adecuado
leer este mensaje a los niños justo después de haber hablado del autor, ya que
permite que los niños puedan identificarse con el autor, dado que lo humaniza
al parecer que está hablando directamente con ellos. El texto conecta desde el
principio con los alumnos, porque afirma que todos tenemos miedo de algo;
algunos de los ejemplos dados afectan también a algunos adultos, demostrando
que el miedo es una realidad para todos.
Primera parte (desde la pág. 9
a la pág. 20)
En estas primeras páginas (realizando 1 ó 2 sesiones
si hicieran falta) no sólo conocemos a la protagonista, Carmeta, sino que, gracias
a las ilustraciones, podemos visualizarla a ella, a su familia y a su casa. Su
comportamiento es entretenido de leer, y es una buena idea aprovecharlo para
iniciar un diálogo en el que los niños piensen en qué sucesos divertidos les
gustaría que pasasen al compartir esta aventura con Carmeta.
¿Cómo es el diálogo de las sesiones? Se debe
intentar que sea lo más natural y espontáneo posible, animando a que cada
alumno intente participar al tiempo que respeta el turno de sus compañeros. Mediante
el diálogo y las expresiones faciales de alumnos sabremos si realmente están
viviendo la historia.
La participación
debe ser espontánea: intentaremos participar todos, pero daremos turno a los
que vayan levantando la mano; no se forzará a participar a nadie, ya que debe
ser algo natural.
Preguntas
para hacer
¿Os gusta a Carmeta?
¿Por qué? ¿Qué opináis de su casa y de su familia? ¿Qué travesuras hacéis
cuando creéis que los padres están distraídos?
En la
ilustración de la página 20, ¿que descubrimos acerca de la relación entre
Carmeta y su papá? ¿Con quién vive Carmeta? ¿Echáis de menos a alguien en
vuestra casa, como Carmeta hace con su papá?
Deberes: leer en
casa la segunda parte y prepararla para la siguiente sesión.
Segunda parte (desde la pág.
20 a la pág. 27)
Su primer
miedo: se empieza con un resumen de la última sesión y se resuelve cualquiera
duda. Después, se anima a la clase con la lectura, eligiendo un voluntario (si
no lo hay, lo hace el profesor) para proponer 3 diferentes continuaciones de la
historia. La clase discutirá las opciones y votarán entre ellas las que más le
guste; después se sigue leyendo. Al final de la sesión, se hablar acerca de si alguna
de las continuaciones fue la correcta.
En esta sesión
solo leemos estas 7 páginas, al contrario que en la primera sesión, en la que
lo importante era completar la presentación de la protagonista para enganchar a
los alumnos y darles suficiente información para que tuviesen una base fuerte.
Esto hace que los alumnos estén motivados y tengan suficiente información, lo
que hará que tengan ganas de participar el diálogo de esta segunda sesión.
Preguntas
para hacer
¿Qué personaje
os ha gustado más? ¿Por qué? ¿Qué creéis que sucederá con ellos? ¿Tenéis miedo
de algo? ¿Compartís los miedos de Carmeta que hemos visto? ¿Qué hacéis cuando tenéis
miedo? ¿Qué representan las líneas circulares sobre la cabeza de Carmeta? ¿Creéis
que los miedos de Carmeta aparecen solo a ciertas horas del día?
El/la
profesor/a hace una serie de afirmaciones; los alumnos deben decir cuáles son
verdad y cuáles no.
Se piden voluntarios
para mostrar las expresiones faciales y el lenguaje corporal. El/la profesor/a
da ejemplos de situaciones de miedo, según el miedo de cada alumno.
Deberes: leer en
casa las páginas 28-38 antes de la próxima sesión.
Tercera parte (desde la pág.
28 a la mitad de la página 38)
Antes de
empezar leer, se dialoga acerca de qué miedos creen que van a aparecer a
continuación. ¿Es posible que la trama cambie totalmente?
¿Creéis que
hay los miedos que hemos visto hasta ahora tienen algo en común? ¿Qué útil consejo
le da el papá a Carmeta?
Una divertida actividad
puede ser hacer que algunos voluntarios lleven máscaras que representen cada
miedo que hemos visto y se pongan de pie frente al resto de la clase imitando a
Carmeta gritando ‘Papá, ¡tengo miedo!’.
Además de ser divertido, puede servir a otros objetivos, como animar a los
tímidos a participar en clase si no se han atrevido a hablar en el diálogo.
Recordar los
miedos que tiene Carmeta para ver el hilo argumental.
Deberes: leer en casa las páginas 38-51 antes de la
próxima sesión.
Cuarta parte (desde la pág. 38
a la pág. 51)
La clase
discutirá la solución que Carmeta y su padre plantean para el problema de los
dibujos que tienen caras tristes. ¿Cuál es la gran idea que Carmeta tiene con
su padre? ¿Qué os parece? ¿Tenéis otras ideas para quitar el miedo?
Actividades
después de la lectura: ¿Cómo ponemos en práctica lo aprendido en el libro? ¿Qué
nos ha aportado la lectura del libro? ¿Qué le diríamos a un amigo para
animarle a leer el libro? ¿Recomendarías este libro? ¿Por qué? Hay que pedir respuestas
concretas; un simple ‘porque me gusta’
no basta.
Cada alumno dibujará
la cosa que les dé más miedo, y después pintarán una sonrisa, como hace Carmeta,
para llevársela a casa y dejarla colgada en su habitación. También pueden hacer
una mural grande en clase con una sonrisa grande en el medio y todos los miedos
(caras sonrientes) pintados a su alrededor.
Una de las actividades
finales consiste en un trabajo cooperativo en el que la clase estará dividida
en grupos de 3 ó 4 alumnos. Cada persona del grupo tendrá un número; siguiendo
el orden de los números, los alumnos deberán inventar un final alternativo para
el libro. Sin embargo, cada uno de ellos solo revelará una parte en la continuación,
de forma que otro de sus compañeros tenga que escucharla y seguir su hilo hasta
formar una historia completa. Los grupos deberán presentan las historias a la
clase.
Estupendo. Solo te has olvidado de la bibliografía...
ReplyDeleteMe ha gustado la idea de hacer un rompecabezas con la portada de los libros!!
ReplyDeleteTiene pinta de ser un libro fantástico, y coincido con el autor por muchos años que cumplamos seguimos teniendo miedos.